viernes, 24 de junio de 2011

RUTAS DE LOS NAVAZOS (VILLALUENGA DEL ROSARIO)

Partiendo desde la plaza de toros de Villaluenga del Rosario (Cádiz) subimos por una empinada ladera a la Sierra del Caíllo donde visitaremos los tres grandes navazos (llanos entre laderas montañosas) que se esconden tras las crestas calcáreas de este pequeño macizo, ya en el límite norte de la provincia gaditana. Una vez visitados volveremos al lugar de salida en ruta circular por el antiguo camino de Grazalema a Villaluenga. Puedes ver las fotos a mayor tamaño haciendo "clic" sobre ellas.


Ficha de la ruta.
La ruta en Wikiloc.


Acabamos de salir de la zona de los árboles que se ven junto a esta peculiar plaza de toros de estructura poligonal del S XVIII reinagurada en 2004. Tiene capacidad para unos 3.500 espectadores en su interior aunque la ladera de la sierra a la que vamos a subir permite un aforo mucho más amplio.
Tras cruzar una cancela encontramos bastantes senderos que nos elevan por momentos sobre el pueblo. Todos ellos acaban encontrándose en veredas más marcadas camino de cueva Rajá.
Pronto encontramos esta pequeña covacha con una estrecha boca vertical de poca profundidad generalmente invadida por la vegetación. Podemos acercarnos a ella desviándonos apenas unos metros de nuestro sendero, aquí más marcado.
En esta zona empezamos a entrar en un estrecho cuello de botella entre dos masas rocosas que nos permitirá ganar altura y salvar los farallones que vemos a la izquierda. Al fondo, tras el pueblo, la verde sierra de Peralto, claramente marcado el carril que conduce a los Llanos del Republicano y en el límite superior de la imagen el macizo de Líbar.
Moviendo la cámara hacia la derecha vemos más pueblo y aparece la sierra de las Viñas y el final (o principio) de la Manga de Villaluenga. A modo de rectángulo negro podemos percibir claramente la gran boca que da acceso a la Sima de Villaluenga.
Manga de Villaluenga. Precioso corredor verde que ha permitido el acceso históricamente a esta zona. Situada entres las abruptas laderas del Caíllo por un lado y la sierra de Ubrique y de las Viñas por otras, está cuadriculada por pequeñas propiedades con ricos pastos que proporcionar ese sabor especial a la leche que sirve de base al queso payoyo.
Los cuerpos inclinados nos dan una buena referencia de la fuerte pendiente que se alcanza en algunos tramos. Sólo herbáceas y pequeños arbustos sobreviven entre las abundantes masas rocas que forman la ladera.
Con cierto cansancio por el desnivel salvado (unos 360 m en menos de 2 km) llegamos al Pto. del Ahorcado, tras el cual aparece el Navazo Alto, que no es otra cosa que un gran poljé, siempre por encima de los 1.200m, de forma alargada en el que desaparece bruscamente la roca calcárea permeable y aparece la arcilla más impermeable que mantiene la humedad.
Ya hemos cruzado la gran dolina (al fondo el puerto por el que llegamos) y aparecen otra vez las calizas. Las aguas que no se filtran por las laderas pueden llegar hasta la base de la enorme nava formando pequeños arroyos que suelen acabar filtrándose entre grietas y simas como la que se percibe cerca de las vacas, auténticas reinas de estos llanos.
Apenas hemos andado 200 m y otro navazo ante nosotros esta vez el Hondo. Nos asomamos al borde de la ladera para asombrarnos de su belleza y tratar de entender como se han podido formar estas grandiosas navas en nuestra sierra. Abandonamos su visión, después bajaremos a él; ahora nos dirigiremos a a otro, al Llano.
Siguiendo la ruta descrita en nuestra ficha buscamos esta peculiar roca que recuerda al caparazón de una gran tortuga a la que podemos subir con facilidad y ampliar nuestra visual del entorno.
Uno de los premios es este horizonte oeste que se extiende hasta el infinito: silueta de la sierra de la Silla, embalse de Guadalcacín (entre ambos está el Charco de los Hurones) y al fondo la bahía gaditana.
Pero mucho más cerca, a nuestros pies tenemos el navazo más bonitos y menos conocido de todos, el Llano. Bajando de la "roca tortuga" podemos acceder a su interior y recrearnos con el paisaje de rocas torturadas por la meteorización que le rodean, en contraste con la paz del tapiz de suaves hierbas que lo tapiza. Siguiendo las arroyadas encontraremos también la sima por la que drenan las aguas.
Desde el navazo Llano retrocedemos a la "roca tortuga" hasta encontrar el sendero que baja al tercero de los navazos a visitar. El camino son una serie de arroyos  entre abundante vegetación hasta que esta desaparece para encontrarnos con un cercado que podemos bordear por cualquiera de sus lados. Nosotros optamos por hacerlo por la derecha buscando los rayos del sol. Encontramos agradables rincones con grandes charcos donde descansamos un rato para acometer en tramo final.
Salimos del último poljé buscando una gran cancela que coincide con el puerto de los navazos y tras cruzarla decidimos buscar un estrecho sendero que nos llevará a Villaluenga. Grandes clastos, a veces claramente colocados a modo de calzada, nos conducen en rápido descenso hacia el Sur paralelos a la cañada del Encinar.
Desde lo alto encontramos esta cabaña de pastores rodeada de corrales al abrigo de los vientos. En algún momento también percibimos otra senda paralela a la nuestra que más adelante comprobamos que se unían. Entre enormes rocas, con suelo muy irregular y senda poco marcada bajamos la ladera de las últimas estribaciones del Caíllo.
Un gran depósito y la carretera nos servirán de referencia para confirmar nuestra buena situación. Seguiremos a media ladera hasta encontrar una cancela que da acceso a un paseo en construcción que poco tiempo nos conduce a Villaluenga, a la que llegamos con los últimos rayos solares entrando por la Manga.
El perfil nos permite entender mejor la situación de los tres navazos.


Nota final. Hicimos la ruta una tarde de abril y no disponíamos de suficiente luz, pero una buena opción es subir al vértice del Navazo Alto desde el Pto. del Ahorcado, para bajar por la otra vertiente y seguir la ruta.

4 comentarios:

kiko dijo...

Interesante ruta, la apuntaré para la proxima tempprada.saludos.

Tercer Tiempo dijo...

Muy interesante Kiko. Calcula como una hora más y sube hasta la cima del Caíllo. Toma el sendero que parte desde el Pto. del Ahorcado para bajar por la ladera contraria hasta el Navazo Alto. Después de estar pintado con los colores de la bandera republicana y la nacional alternativamente, ahora el vértice geodésico ha pasado al gris neutro. ¿Por cuánto tiempo?

Paulaa dijo...

:| si sois unas personas normales con niños o familia no id a este sendero, bueno mejor no id a este sendero aunque seais una pareja...tienes que subir un terraplen gigantesco que parece que no se acaba(se tarda 2h en subir)solo hay piedras..tambien es verdad qe la parte de arriba es bonita(pero no es para tanto)y hay piedras para sentarse a comer.(por cierto la piedra tortuga no existe) cuano vayas a bajar tienes que subir unas piedras y hay un camino de de cabras(si tienes hijos no bayas a este camino porqe te acojonas con tantos acantilados qe te caes y te qedas en el sitio) no transitan personas, por en camino vas mas solo qe la una..el paisaje es precioso(para un lado)para el otro solo hay piedras,piedras,piedras y mas piedras..
os recomiendo:si qereis practicar escalada este es tu lugar.los hay muxisimo mejores..
espero qe os sirva de ayuda: BSS Paula
aah!! mi tuenti es paula gutierrez si me qereis preguntar algo sobre el camino agregadme :)

Tercer Tiempo dijo...

Saludos Paula. En ningún momento proponemos esta ruta para niños. Es un precioso sendero para los que quieran sentir la emoción de elevarse sobre Villaluenga y llegar a los inigualables Navazos. Efectivamente hay muchas, muchas, rocas en la ruta, pero también los preciosos prados de la base de los grandes poljes.
La roca que recuerda al caparazón de una tortuga (con imaginación por supuesto)sí que existe puedes verla en la foto.