El pasado 8 de marzo nos desplazamos a Grazalema ante la noticia que informaba que habían reventado los Caños del Tajo, en la parte baja del Asomadero, junto a la Calzada Medieval de Grazalema, muy cerca de la carretera A-372 a Ronda. La última vez había ocurrido en 2009 y tendríamos que remontarnos casi una década para encontrar otro episodio similar. Íbamos con temor por si ya habían cesado, ya que suelen duran pocos días, al menos en su plenitud. Actuó de cicerone Juan Castro, que por su edad y erudición conoce sobradamente el hecho.
Después de las extraordinarias lluvias de los días 5, 6 y 7 de marzo el día 8 parecía dar una tregua para disfrute del lugar. Los tejados relucían por la limpieza que las toneladas de agua habían conseguido. Al fondo la pequeña sierra Morena.
Desde el balcón de Juan la vista era magnífica: a la izquierda el pequeño Peñón de la Asamblea, a la derecha Sierra Morenita y bajo ambos el caserío, bien conservados sus tejados, sin las desagradables terrazas que tanto proliferaron a finales del siglo XX.
Iniciamos la visita junto a la fuente de Peñaloja, que por supuesto soltaba un buen caudal que se encauzaba por las cunetas de la carretera hacia el Guadalete.
Los grandes cortados rezuman agua por todos sitios, agua que ha empapado toda la sierra del Endrinal, calcárea, porosa, permeable; horadada de túneles subterráneos y simas que poco a poco van colmatándose de agua hasta que esta tiene que salir por algún sitio.
Las grietas por las que mana el agua pueden estar a diversos niveles; esta de la foto (popularmente conocida como el Chocho la Vieja) se encuentra a un metro de la carretera y un vecino aseguraba "que cuando llovía de verdad" llegaba a cruzar la calzada de lado a lado.
Al parecer el agua empezó a brotar el día 7 ya por la tarde. Recordar que ese día cayeron 193 mm en la zona, el día antes unos 115 mm y el anterior 62 mm; acumulando a lo largo de este año agrícola unos 2.725 mm.
Otras aguas proceden de manantiales a pie de roca y son menos espectaculares pero que aportan gran caudal. Pudimos localizar bastantes puntos en todo el tajo.
Este es el principal de todos ellos, el Caño Grande, situado también cerca de la carretera pero algo más apartado, donde se inicia una escalinata empedrada de amplios peldaños que no es otra que un tramo de la Calzada Medieval.
Por ella descendía un importante aporte procedente del caño más alto. Su estado de conservación, al menos en este tramo es magnífico.
Perspectiva para hacernos una idea más clara de la situación del Caño Grande.
Una última imagen del Caño Grande.
Todas las aguas se encauzan a un gran sifón que cruza la A-372 y lleva el fuerte caudal acumulado al cercano Guadalete. Con esta imagen nos despedimos de los Caños del Tajo impresionados por su belleza. Pueden ampliar la información en este enlace a "Conoce tus Fuentes", de nuestro amigo José Luis Valencia Oca.
El fenómeno del "reventón" es conocido en la hidrogeología con el término trop plein, tomado de la literatura científica francesa y que significaría "demasiado lleno". (Esquema y comentario tomado de Manantiales de Andalucía). En las anteriores fotos hemos visto tanto "manantiales trop plein", los caños, como "manantiales de base", las surgencias.
El fenómeno del "reventón" es conocido en la hidrogeología con el término trop plein, tomado de la literatura científica francesa y que significaría "demasiado lleno". (Esquema y comentario tomado de Manantiales de Andalucía). En las anteriores fotos hemos visto tanto "manantiales trop plein", los caños, como "manantiales de base", las surgencias.
Aprovechamos la mañana para dar un paseo por la Ribera de Gaidovar y fotografiar esta otra perspectiva de la Cresta del Gallo o Peñón Gordo.
El ambiente limpio dejaba ver espléndidamente la ladera donde proliferan los grandes cortados y farallones del cerro Coros, en contraposición a la falda más alomada de la vertiente opuesta.
Otra panorámica de gran belleza ofrecía Monte Prieto y las laderas que bajan al valle o Ribera de Gaidova surcado por el arroyo del Espinar, el del Caballo y el mismo Guadalete.
Nos despedimos de Grazalema con ganas de volver y disfrutar de sus inigualables paisajes. Lo haremos pronto.
Puedes ampliar la información de otros episodios en:
5 comentarios:
¡Qué alegría de agua! Gracias por mostrar estas magníficas fotos y gracias por las referencias a mi blog. Saludos
Excelente registro fotográfico de este "acontecimiento natural".José Antonio.
Saludos.
Como siempre genial crónica y fantásticas fotografias. Un saludo desde Sanlúcar de su compañero y alumno senderista Paco Moscoso. Espero que pronto nos veamos en la Sierra.
Te dejo enlace de mi página de fotografia asi como de la página personal.
http://roble.pntic.mec.es/fmos0021/photography3/photography.htm
www.pacomoscoso.es
Un abrazo.
Es que el agua es vida!!! Gran trabajo y enhorabuena por enseñarnos tan bellos parajes.
Saludos, Selu, Paco, José Antonio y Jesús. Gracias por vuestros comentarios. Las lluvias han causado problemas, pero también nos están permitiendo disfrutar de espectáculos inigualables.
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