viernes, 8 de noviembre de 2019

Parralejo-La Sierra-Puerto de la Breña-Puerto del Pilar de los Toros-Cortijo Caete


Entramos a la zona siguiendo un carril, paralelo al arroyo Parralejo, que sale de la CA-8102 de Prado del Rey a Zahara de la Sierra. Nuestra meta inicial es subir a un cordal de cerros que separan los arroyos Parralejo y Bocaleones y lo hacemos por un sendero limpio en este momento (noviembre de 2019) que nos eleva hasta un cortafuego que corona esos cerros conocido en la zona como La Cordillera y en los mapas como La Sierra. Por ahí están las fincas Parralejo, Las Monas, Albarranes… Acabaremos bajando hasta el puerto de la Breña y seguiremos la pista forestal Zahara-Benamahoma hasta el puerto del Pilar del Peñón de los Toros. Ya de regreso seguiremos otra sucesión de altozanos hasta llegar a cerro Prieto, en una de cuyas laderas está el cortijo de Caete. Desde allí buscaremos el punto de inicio bajando al arroyo Parralejo y siguiéndolo durante un tramo corto. Ruta poco conocida pero espectacular por sus panorámicas a pueblos, sierras, cerros y montes cercanos.
Nota: Salvo el tramo por la pista forestal, el resto de senderos son antiguas veredas a veces perdidas, caminos de cabras y cortafuegos. El tramo que va desde el waypoint  «13-Cerro del Carraolo-Cota 684» al «14-Angarilla» es una fuerte pendiente pedregosa y suelo suelto paralela a una alambrada. En los mapas aparece un antiguo camino que bordea ese cerro que quizá podríamos seguir aunque perderíamos la cota 684 presidida por un gran acebuche de dos patas y unas panorámicas grandiosas.
En el cortijo de Caete vive Paco y su encantadora madre doña Rosario, siempre dispuestos ambos a ofrecernos un café o una tapa de queso y orientar a los senderistas educados.

La ruta en Wikiloc. Enlace
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Este es el carril que parte de la carretera y conduce al caserío. Dos o tres coches se quedan bien en los laterales. La vereda del arroyo Parralejo, antiguo camino de Zahara, se inicia en la parte trasera de una de las casas.

Primera de las angarillas a superar. El sendero, a fecha de publicación, está muy limpio por un desbroce reciente (2019). Hemos ido en ocasiones anteriores y resultaba complejo transitar por él.

Señalamos este punto peligroso, que pueden acrecentar su dificultad las escorrentías, por la movilidad del suelo y el considerable precipicio de la derecha.

Entre la retama y el palmito debemos pasar para desviarnos hacia la izquierda e iniciar la subida a «La Cordillera».

La rápida elevación nos permite empezar a disfrutar de las primeras panorámicas como esta preciosa vista de Algodonales, su Mogote o sierra de Líjar, partida en dos por la Cañá que ya empieza a mejorar su verdor tras el largo estío de 2019.

Por intuición, siguiendo un track manual de elaboración propia trazado usando las vistas aéreas, llegamos a la ruinas de una cortijada llamada la Casa de la Sierra.

Como vemos, apenas si queda algún tramo de pared en pie. Desde aquí seguimos un sendero más o menos marcado que pudo ser una vereda hacía Zahara según nos informa un gandero de la zona. También podemos recurrir a un cortafuego paralelo a una cota más elevada.

Siguiendo la vereda comentada acabamos conectando con el citado cortafuego. Vemos un claro en la vegetación de uno de sus márgenes y nos asomamos al primero de los miradores. Realzada por el contraluz matinal, Zahara; al fondo la sierra del Gastor (Algarín y las Grajas).

Avanzamos hasta encontrar un amplio cortafuego. Aquí teníamos previsto girar 90º a la derecha, pero lo hacemos hacia la izquierda buscando un interesante mirador. Camino de él encontramos esta construcción al lado de lo que parece una casa en ruinas. Nos recuerda a algún tipo de aguardo o puesto de caza.

Se confirma lo que preveíamos, el mirador ofrece una amplísima panorámica: nuevamente Algodonales,…

…a su derecha aparece Olvera y el embalse Zahara-El Gastor…

…y por supuesto, una vez más Zahara y su castillo cristiano-nazarí del que destaca la torre del homenaje. Una vez admirado el paisaje retomamos los caminos de cabra que surcan el cortafuego buscando cotas más altas que alternan con suaves vaguadas.

Llegamos al puerto de La Crista. Un incendio en 1983 arrasó muchos ejemplares de encinas, solo quedó como muestra este hermoso ejemplar y el tocón de su pareja. Cercanos crecen algunos algarrobos de buen tamaño. (Sabemos que en esta zona (El Parralejo) nació el bandolero de Zahara Francisco Villaescusa el Cristo, que en esta Sierra es donde cometió su crimen más documentado y que su mujer era conocida como Encarnación la Crista. ¿Habrá alguna relación entre el puerto, el bandolero y su mujer?

En el sentido de la marcha, a nuestra izquierda, aparece el valle del arroyo Garganta Seca, auténtica brecha en esa zona amesetada de la Camada del Puerto y la Breña Chica. Rematando el gran surco el cerro de la Cornicabra. También visibles el San Cristóbal, el Torreón y el Pilar. Abajo, en una zona clareada se intuye el cortijo de Mataconejos.

A la izquierda el cortijo de Caete, territorio por donde volveremos ya de regreso.

Pasamos alguna cota más y llegamos a la 649. Miramos atrás para despedirnos de la amplísima panorámica que hemos venido disfrutando.

Superada la cota anterior iniciamos un suave descenso para afrontar la siguiente (684 m, la más alta). En la zona es conocida como el cerro Carraolo. Como un hito en medio de la pequeña zona amesetada, aparece un enorme acebuche de dos patas, bien podados sus bajos por las cabras, que como compensación lo abonan con generosidad a la vez que descansan bajo su sombra. Ahora nada dificulta la visión, son 360º increíbles de vistas a media provincia.

Para no repetirnos solo vamos a destacar dos de esas vistas: el tramo final de la Garganta del Parralejo donde se divide siguiendo  cauces menores. Siempre con el cónico cerro Margarita en lo alto (1172 m).

En otro ángulo la loma del Peñón de los Toros (1027 m) y su complicada crestería ya cercana a sierra Margarita.

Cuando decidimos iniciar el descenso desde el Carraolo hacia el puerto de la Breña vemos que una alambrada nos impide el paso, además de una fuerte pendiente. Decidimos bajar paralelos a ese cercado, salvando un fuerte desnivel de terreno suelto, buscando una angarilla. Los mapas nos señalan un sendero a media ladera para evitar el cerro y que efectivamente encontramos en el waypoint 14. Cada uno que decida por donde hace este tramo, tampoco podemos asegurar que ese sendero esté practicable. Sí afirmamos que el cerro Carraolo, el del gran acebuche merece la pena subirlo. También se puede retroceder a buscar la senda.

Esta es la angarilla que hemos comentado. Tras ella se inicia un camino claro (¡ojo!, con varios ramales, seguir track) que en poco tiempo nos lleva al…

…puerto de la Breña con su pequeño helipuerto…

…y un rectángulo cercado y hormigonado que nos comentan es utilizado para el despiece de los animales cobrados en las bastidas de caza mayor.

Siguiendo una amplia pista que viene desde Zahara y se dirige a Benamahoma bajamos por una zona muy agradable al valle del arroyo Parralejo, donde encontramos esta angarilla (imagen tras cruzarla) e iniciamos una larga cuesta siguiendo el mismo camino buscando otro puerto.

Lo encontramos en una zona amplia y despejada  conocida por los lugareños como el puerto del Pilar del Peñón de los Toros, que actúa como cruce de caminos. A nuestra derecha, por donde hemos venido; a la izquierda una bajada a esa fuente o pilar cercano y a nuestra espalda la travesía que sigue hacía Benamahoma, camino público siempre en litigio permanente entre Ecologistas en Acción y los dueños de la Sociedad Breña del Agua. Nosotros iniciaremos el ascenso por donde indica la flecha buscando un nuevo cordal de cerros camino del cortijo de Caete.

Una zona allanada y empedrada nos llama la atención, es una era, «de las más grandes y mejores de la zona por estar dispuesta a dos mareas [vientos], de manera que podía utilizarse cualquier día, soplara de donde soplara el aire», como nos aclaró Paco del cortijo Caete.

Camino de la primera cima nos topamos con un bosquete de acebuches arbóreos de gran tamaño estimulado su crecimiento vertical por el ramoneo de las cabras.

En una zona señalada en los mapas como Llano de las Torres aparece este perezoso conocido como El Charcón. Al fondo nos sigue acompañando la loma del Peñón de los Toros.

Localizamos la angarilla que da paso a la finca de Caete, y tras cruzarla…

…aparece otra vez Zahara, parcialmente oculta por la Sierra o Cordillera que transitamos anteriormente.

Desde aquí vemos ya el cerro Prieto, tras el cual está el cortijo. Como señalamos en la imagen de Google Earth lo bordearemos por la izquierda por un sendero bien señalado.

Ahora vemos el cerro Prieto desde el lado opuesto y el sendero por el que hemos llegado. En una zona estratégica y muy bien situado está el cortijo de Caete, siempre vigilado por los perros, los más peligrosos atados.

Estos son los dominios de la señá Rosario, donde cuida con esmero, pese a su considerable edad, el patio con sus macetas, la cocina, la chimenea, elabora sus quesos y ayuda en todo lo que haga falta. Tras charlar con ella y su hijo Paco nos señalan un atajo (bastante inclinado y sin sendero claro) que nos lleva a una vereda de sierra…

…que bordea la ladera del último cerro en descenso hacia el valle. En su primer tramo está poco señalado pero pronto se ensancha y permite un descenso cómodo. En la imagen lo fotografiamos una vez pasado ya el arroyo Parralejo.

La estrecha vereda que venimos siguiendo se introduce entre la maleza y aparece el Parralejo. En este lugar coincide con un manantial a cauce del que sale alguna goma. Debemos tener en cuenta que tras lluvias es posible que no podamos cruzarlo. En ese caso, desde el cortijo baja un carril hasta la carretera que nos deja apenas a 200 m de donde hemos salido.

Mapa de la ruta sobre cartografía del IGN.

Agradecimientos:
-A Paco del cortijo Caete por sus orientaciones y topónimos de la zona.
-A Antonio Campanario buen conocedor de la zona.
-A Fernando Sánchez que nos orientó en el último tramo.

© del texto y las imágenes Pedro Sánchez.
© de la publicación «Grupo de Senderismo El Tercer Tiempo».

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